sábado, 22 de octubre de 2005

Desde la ventana de Mayke


Hoy es lunes, son las tres de la tarde. Dos jardineros están trabajando en el jardín. El que es lo más joven, barre las hojas secas. El otro jardinero que lleva las botas de agua rojas, está rastrillado la senda. Para recoger las hojas caídas, el jardinero está agachado. Al mismo tiempo el viento sopla las hojas por el jardín por lo que los jardineros se ponen a reír.

El conserje, un hombre de cincuenta años, ha cercado su aparcamiento con una cinta de plástica con rayas rojas y blancas. Está cogiendo el coche y sale el terreno. En el jardín dos mujeres están sentadas al banco, una mujer rubia y una mujer pelirroja. Se ponen las ropas blancas porque son enfemeras en la clínica privada que está debajo de mi piso. La rubia está comiendo un bocadillo. La pelirroja está fumando un cigarrillo y se pone el periódico al banco. Las mujeres miran a los jardineros y están charlando animadamente sobre ellos.

El jefe de la clínica privada está andando con un carrito lleno de los documentos. Atrás en el jardín está una casita donde se ponen estos documentos.

Enfrente de mi piso hay una casa donde un chico está pintado la pared. El chico alarga el brazo para pintarla. Hay también una chica que está limpiando los cristales.

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